En torno a las depuradoras

(Conclusiones extraídas de una conversación con un amigo, ingeniero de obras públicas, que ha participado en la construcción de alguna que otra depuradora en el sur de España)

... Los filtros que impiden que una depuradora cerrada emita olores al exterior son eficaces, siempre que estén -lógicamente- puestos y se sustituyan cuando éstos se gasten.

... Los escapes pueden llegar a más de 4 kilómetros, pero las probabilidades de que ocurra un accidente son escasas. Una avería es poco frecuente, pero la posibilidad de que una avería coincida en el tiempo con un escape (al exterior) es aún más infrecuente. Un corte de luz puede desembocar en un mal funcionamiento de los sistemas, pero no necesariamente en un escape. Además, generalmente se cuenta con equipos eléctricos autónomos para emergencias.

... Los problemas inmediatos serán los ruidos y vibraciones a raíz de la construcción de la depuradora. Después de una primera fase de sondeos para saber qué peso puede aguantar el terreno, será hora de las excavaciones y voladuras para hacer hueco a los distintos vasos contenedores. Los fosos por los que pasarán las aguas en su ciclo de depuración pueden llegar hasta 10 metros de profundidad. Cada metro supone una tonelada de agua que ha de soportar el terreno.